La actriz confesó que su pequeña externó su deseo de ver a sus padres juntos como pareja.
La separación entre Gabriel Soto y Geraldine Bazán se convirtió en una de las más polémicas que se haya vivido en el medio del espectáculo, pues a pesar de haber formado una hermosa familia, la pareja decidió ya no más estar juntos. Sin embargo, poco tiempo después, el actor inició un romance con Irina Baeva, quien fue señalada como la tercera en discordia.
Desde entonces, la modelo rusa y Bazán han protagonizado una serie de indirectas en redes sociales, pues la actriz asegura que Irina se interpuso en su matrimonio, mientras que esta última ha negado todo tipo de acusaciones un sinfín de ocasiones.
Pero tal parece que no solo la expareja sufrió debido a su separación, sino también las dos pequeñas que tuvieron juntos, pues de acuerdo con Geraldine, una de ellas recientemente externó su deseo de que volverían a ser una familia los cuatro.
Miranda le pidió a Santa Claus que sus papás volvieran
Durante su reciente participación en el programa Montse & Joe, Geraldine Bazán se sinceró sobre el fuerte motivo que la han llevado a no hacer públicas sus relaciones, pero también lo difícil que fue para sus hijas enfrentarse a la separación de sus padres y el profundo deseo que tuvieron de verlos juntos.
Al ser cuestionada sobre Montserrat Oliver si sus hijas quieren que regresen, la actriz comentó que en el principio "obviamente" deseaban que regresaran, pero recordó que hace un año su hija menor Miranda le pidió a Santa Claus que sus papás volvieran durante un evento escolar.
"Uno de los papás de las niñas (amigas de sus hijas)... Los niños iban con el Santa Claus y le decían qué querían, y entonces estaba tomando (grabando) a todos los niños y llega y me enseñó un video que Miranda le pidió a Santa Claus que quería que sus papás estuvieran juntos", comentó.
A pesar de que después intentó hablar con su pequeña, esta se negó a revelar la verdad detrás de su deseo. Por otro lado, aseguró que sus hijas tienen padres que las quieren y mantienen una buena relación con ellas, por lo que "tienen ya muy clara la mecánica" de cómo funcionan las cosas en su familia tras el divorcio.